Teoría de la riqueza
Qué dicen los expertos en economía:
“El único método conocido para conseguir riqueza, es ser dueño de una empresa, que pueda crecer permanentemente, e invertir las ganancias, para que el dinero, produzca más dinero.”
Esta teoría es la base de la educación financiera, que nos muestra que la fuente original del dinero, son las ganancias que produce una empresa, teoría que le han enseñado al 5% de los pobladores del mundo, que son multimillonarios y viven en extrema opulencia. Mientras que al 95% de los habitantes de la tierra, les enseñan educación para el trabajo, es decir, trabajar para producirle riqueza a otros.
El asunto es que, así está montado el sistema educativo, y por eso las personas que nos rodean, en su mayoría, por falta de formación, tienen miedo de trabajar para sí mismos y prefieren aporrearse toda su vida, laborando para otros, a cambio de un salario, que nunca será suficiente para cumplir sus sueños y metas.
Qué pensamos en SÍ ASÍ:
Muchas personas por razones de interpretaciones religiosas, convicciones filosóficas, o para justificar su postración económica (pobreza), o porque son pusilánimes, dicen que ser ricos es malo. Pero la riqueza existe, no podemos desconocerla, y si es utilizada de la forma correcta, para ayudar a la familia, al prójimo, dándole el primer lugar a Dios que al dinero, no es mala, Dios la permite.
Pensar en riqueza, no es esencialmente entrar en la ambición de ser multimillonarios, o en convertirnos en idólatras del dinero, o acumular exceso de bienes.
Sustancialmente los sinónimos de la palabra riqueza encontrados en Google.com, son: “bienestar, holgura, prosperidad, y lo contrario es: miseria.”
Wikipedia y la Enciclopedia de economía define riqueza como: “el conjunto de bienes, derechos y obligaciones de una persona física o jurídica, privada o pública” y la “suma algebraica de los valores de todos los elementos que forman parte de este conjunto”. Lo contrario es pobreza.
La enciclopedia de los negocios dice: “el término riqueza se suele utilizar como sinónimo de patrimonio o capital.”
La pregunta que surge es: ¿Cuál es su riqueza material? Sume el valor de los bienes que posea, más el dinero que tenga guardado, réstele las deudas, y el resultado es la riqueza que usted tiene.
Un ejemplo: La riqueza de Pedro al decidir desarrollar nuestro sistema era: Una casa avaluada en 90 millones de pesos, un carro de 25 millones, y en la cuenta de ahorros tiene 800 mil pesos. Pero está pagándole al banco un préstamo, y el saldo pendiente es 6 millones 100 mil pesos. Al sumar casa, carro y ahorros, y restarle el saldo del préstamo, nos da que la riqueza de Pedro son 109 millones 700 mil pesos.
¿Es malo que Pedro tenga esta riqueza?
¿Es malo que Pedro quiera aumentar su riqueza, aspirando a tener una mejor casa, un mejor carro, y aumentar el saldo en su cuenta de ahorros?
Buscar bienestar y prosperidad, son condiciones que todos los seres humanos pueden alcanzar, y existen, para que todos puedan vivir mejor.
¿Dios quiere que usted viva en la pobreza?
«Todos nuestros sueños pueden hacerse realidad si tenemos el coraje de ir a por ellos.» Walt Disney
«Intenta no convertirte en una persona de éxito, si no en una persona con valores.» Albert Einstein
Qué dice la Biblia:
En Deuteronomio 8: 18 dice la Sagrada Escritura: “sino acuérdate de Jehová tu DIOS, porque él te da el poder para hacer las riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día.”
Aquí hay dos mensajes muy claros,
el primero: cuando Dios le añada abundancia material a tu vida, cuídate de no olvidarte de Dios, la primera riqueza que todo ser humano debe buscar es la espiritual, estar cerca de Dios en todo momento, y agradecerle la prosperidad que nos da. Lo malo de la riqueza es cuando ponemos primero el amor al dinero, practicamos la codicia y la avaricia, pero si primero amamos a Dios, y con las ganancias que él nos da, hacemos el bien, seguro que Dios nos dará mucho más en lo material.
El segundo mensaje es:
“él te da el poder para hacer las riquezas”, esta frase nos muestra que Dios da el poder para hacer. La palabra clave es “hacer”, es decir que la riqueza la hacen las personas, no aparece súbitamente en la vida de nadie, Dios da el poder para hacerla, trabajarla. Con las manos cruzadas, tu vida no prosperará.
La Biblia nos enseña que Dios quiere la prosperidad para todos, pero no debemos volvernos orgullosos, ni maltratar a nadie con la riqueza y jamás olvidarnos de Dios.
Amonestación de no olvidar a Dios
Biblia: libro Deuteronomio capítulo 8
11 Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios, para cumplir sus mandamientos, sus decretos y sus estatutos que yo te ordeno hoy;
12 no suceda que comas y te sacies, y edifiques buenas casas en que habites,
13 y tus vacas y tus ovejas se aumenten, y la plata y el oro se te multipliquen, y todo lo que tuvieres se aumente;
14 y se enorgullezca tu corazón, y te olvides de Jehová tu Dios, que te sacó de tierra de Egipto, de casa de servidumbre;
Si haces bien hecho tu trabajo, deja en manos de Dios, que él sea quien determine los límites de la abundancia que te quiera dar, pero debes moverte ahora mismo a salirte de la zona de conformismo y buscar el bienestar. Tenemos la seguridad que Dios no quiere verte pobre, él quiere que seas diligente, trabajador y dispuesto para cambiar tu vida.
Si ya sabemos que la fuente de la riqueza, son las ganancias que produce una empresa, que pueda crecer permanentemente, entonces usted debe empezar a cambiar su vida económica emprendiendo su empresa propia, y nosotros le ofrecemos un sistema para lograrlo.
Queremos enseñarle a pensar y trabajar de la manera como lo hace el 5% de la población del mundo, quizá no te conviertas en un multimillonario como ellos, pero estamos seguros, que sí mejorarás tu vida económica, y tendrás estabilidad, de una manera que no habías imaginado.
